Si se me hizo chiquito el mundo de buscarte, y no te encontré. Te me cruzaste en cada semáforo y al virar la esquina me di cuenta que no eras tu.
Sí te pensé mientras comía esa pizza sin tomate y al ir al cine y tener frío todo el tiempo, es que las chompas ya no son suficientes. Si te esperé en la cama por si llegabas con el café, pero logré ponerme la alarma 5 minutos antes para prepararlo yo.
Si se me hizo chiquito el mundo de buscarte, porque estabas en cada carretera, cuando me escapaba de casa por un poco de tranquilidad, en esa sopa que al tomar siempre me quemaba, porque no estabas para decirme que tenga cuidado, que me iba a quemar.
Si me perdí en las mismas calles, porque esas tantas veces que fuimos, nunca supe como llegar, te veía a ti mientras caminaba, y si te esperé afuera de tu trabajo porque no sabía otro lugar mejor para andar.
Se me hizo chiquito el mundo de buscarte, y no te encontré. Al fin después de tanto tiempo entendí, que el café a solas y llevar una chaqueta siempre, no está mal.
Sí te esperé, pero he aprendido a caminar y apreder las direcciones de cada lugar.