
Se detuvo un tanto nerviosa, ambos se vieron a la cara y él sonrió. Ella rompió el silencio y ambos se echaron a reír.
– ¿Cuándo te volveré a ver? – Preguntó ella, antes que pensara su respuesta abrió la puerta y se bajó.
– Siempre, respondió él – Pero nunca más la vio.
– ¿Cuándo te volveré a ver? – Preguntó ella, antes que pensara su respuesta abrió la puerta y se bajó.
– Siempre, respondió él – Pero nunca más la vio.